Al igual que las personas, a las plantas de interior también les afectan los cambios que se producen en el exterior, en este caso, con el cambio de estación hacia el verano. En este post te explicamos las claves y los cuidados recomendables para las plantas de interior cuando suben las temperaturas.
Consejos para cuidar las plantas en verano
Ah! Por fin verano. ¿A quién no le gusta el verano? La playa, el sol, el calor, la hamaca, el tinto de verano y tiempo para disfrutar. Al igual que las personas, las plantas de interior también pueden deshidratarse y quemarse sus hojas por el sol. Al igual que durante la primavera, en verano las plantas también siguen creciendo. Con unos pequeños ajustes en el agua, luz y sus rinconcitos, podemos hacer que para las plantas de interior el verano sea también su temporada preferida.
Dale de beber
Todos los seres vivos necesitamos beber agua para mantenernos con vida. Durante el verano dale de beber a tu planta con mayor frecuencia que en otras estaciones como en Otoño o invierno. Si tu planta se marchita o se le curvan las hojas, es signo de que necesita beber más. La mejor hora del día para regar tus plantas es o a primera hora del día, o a última hora, cuando el sol y el calor son menos intensos. De esta manera estaremos evitando quemar la planta y evitando que el agua se evapore más fácilmente. En el caso de que notes que el agua se evapora muy rápido puedes probar a colocar unas piedritas o cortezas en la parte superior de la tierra para ayudar a retener el agua. Otro de los trucos que funciona muy bien es mantener varias plantas juntas, pulveriza agua sus hojas y eso ayudará a mantener la humedad en el ambiente.
Al rico sol
Como bien sabes, la mayoría de las plantas de interior no toleran el sol directo en sus hojas, en el caso de que a tu planta le incida el sol directamente es recomendable cambiar tu planta de sitio o puedes probar a ponerla detrás de una cortina. Otro truco muy útil es rotar la planta 1 vez a la semana para que todos los ángulos y hojas puedan disfrutar de la luminosidad del rincón. Así conseguirás que la planta crezca igual por todos los lados, además evita que la planta se incline hacia ciertos lados.
¿Y qué pasa con el aire acondicionado?
Aunque dejar el AC encendido mientras no estás en casa en tentador, piensa en tus plantas y en lo que te puedes estar ahorrando si lo dejas apagado. Los AC secan y enfrían el ambiente, mientras que la mayoría de las plantas de interior provienen de lugares tropicales donde reinan las temperaturas templadas y la humedad en el ambiente – justamente lo contrario. Por ello, evita mantener una exposición prolongada de tu planta cerca de un AC. A nosotros nos encanta tener varias plantas juntas ya que crean una atmósfera de humedad en el ambiente que es perfecta para ellas.
Retira todas las hojas amarillas de tus plantas
Cuando tu planta amarillee sus hojas y veas que se van a caer, retírala y sobre todo evita que se acumulen en la base de la planta hojas marrones caídas ya que atraen insectos indeseados para tus plantas de interior.
Sácala a la calle
Si tienes un rinconcito donde puedas sacar tu planta, anímate ¡ a todos nos gusta un poco de aire! Las plantas también pueden beneficiarse de estar en la calle. Ten en cuenta que no todas las plantas podrán soportar estar en la calle por lo que te recomendamos que eches un vistazo a nuestra lista. En el caso de que tu planta sea una de las afortunadas, realizaremos la salida de manera progresiva, para que el cambio de temperatura y ambientes sea lo menos drástico posible. En cualquier caso, es conveniente que la temperatura de la calle no baje de los 18ºC. Al principio coloca la planta en lugares sombríos y donde casi no lleguen los rayos del sol, a medida que la planta se vaya acostumbrando a su nuevo rincón puedes moverla a lugares más luminosos pero recuerda, evita siempre una exposición directa a los rayos del sol o a tu planta se que le quemarán las fabulosas hojas.